dimarts, 27 de maig del 2014

Esperando el arcoíris.




En una playa desconocida, sentado en una mecedora gastada,  se deja balancear por la brisa de recuerdos aun por forjar. Y, arropado por la soledad que ha dejado la tempestad, por un momento es arrastrado por una sonrisa, adormeciéndose con el suave traqueteo de la marea de lágrimas que se aleja. 

Despierta algo confundido, rompiendo otra de esas pesadillas en las que apareces tú. Vacía sus bolsillos de mariposas inconscientes que se convierten en polvo que cae lentamente sobre la arena. La planta de sus pies arde cuando súbitamente se incorpora. Echa a correr impulsado por la sed, y de un salto se eleva por encima del horizonte. Detiene un tiempo que no le pertenece, que no pertenece a nadie y ante el arcoíris que lo observa piensa: “Nunca supuse que la belleza tuviese un sabor tan agridulce.”


dimecres, 7 de maig del 2014

Uno de me es igual.


Stand by emocional. Zarpas abriendo regalos de navidad. Juego sucio y malas cartas en malas manos. Amontonando excusas en una barca que se hunde. ¿Qué quieres? Me es igual. Uno de me es igual. Serenidad, se decía a punto de salir corriendo. Una vida que resulto estar mal señalizada. Catarsis sobre el papel, como renglones llevados por la brisa del pensamiento. Un amanecer que rompe contra el acantilado de la oscuridad. La vida son cuatro días. ¡Tantos! ¿O más? Quería venir a vomitar berborrea emocional para evitar el silencio. Soy intransigente ante mis pecados, aquellos que recuento por las noches para coger el sueño. Un piano desafinado anuncia tu entrada. Ojos que se pierden detras del espejo. ¡Alguien me puede servir uno de me es igual de una puta vez!